El derroche de alimentos tiene un impacto negativo sobre el planeta
Según la FAO el volumen de alimentos no aprovechados a nivel mundial es de 1.600 toneladas (1.300 comestibles). Esto tiene un importante impacto negativo para el planeta:
- Aumento de la huella de carbono.
- Desperdicio del agua invertida cada año en producir estos alimentos.
- Millones de hectáreas de cultivo desperdiciadas (28% de la superficie mundial).
- Amenaza para los ecosistemas: explotación de la agricultura y menos alimentos para los animales.
- Consecuencias económicas de hasta 750 millones de dólares anuales.
3 recomendaciones clave para dejar de tirar comida
Para hacer frente al derroche de alimentos, te proponemos una serie de herramientas que te ayudarán a tener un estilo de vida más sostenible:
1. Para empezar, antes de ir al mercado, redacta una lista de la compra:
Para ello, diseña un menú en base a los alimentos a punto de caducar. Después añade el resto de los alimentos frescos que tengas en casa y, por último, crea una lista de la compra con aquellos alimentos que necesitas para completar tu menú. De esta manera, solo comprarás lo que necesites y no dejarás que se estropee ningún alimento.
2. Cuando vayas al mercado, también debes poner atención en la forma de producción de los alimentos. Para ello, guíate por las etiquetas, ya que estas nos hablan de:
- Su lugar de origen.
- El método de producción.
- Los ingredientes utilizados.
- Incluso pueden indicarnos si es un producto de comercio justo, es decir, nos asegura que el productor recibirá un precio justo.
3. Una vez en casa, puedes evitar el derroche de alimentos aplicando 3 sencillos pasos:
- Cocina el máximo de alimentos posible.
- Congela aquellos alimentos que no vayas a utilizar.
- Cocina en bloque (Batch cooking), ya que te permitirá cocinar un gran número de alimentos en poco tiempo.
Además, te proponemos algunos trucos para almacenar tus alimentos durante más tiempo, en buenas condiciones y para aprovechar aquellos que están a punto de estropearse.
Recomendaciones | Recetas de aprovechamiento | |
PAN | Enemiga: humedad. Almacenamiento: papel o tela. Truco: corta en rebanadas y congela. Recetas: migas vegetarianas o pudin. | Migas vegetarianas: con cebolla, pimientos, ajo, pan duro, huevo, pimentón, aceite de oliva y sal. Pudín: Con pan duro, manzana, huevo, leche, dátiles, vainilla y ralladura de limón. |
HUEVO | Enemiga: temperatura. Almacenamiento: en nevera. Almacenamiento sin cáscara: bote de cristal. Truco: almacena las yemas cubiertas con agua. Recetas: carbonara o natillas. | Carbonara clásica: a partir de yema de huevo, parmesano y agua. Natillas de naranja: con zumo de naranja, yema de huevo, maicena, canela, ralladura de naranja. |
FRUTA | Enemiga: humedad y otras frutas. Almacenamiento: tela o nada. Truco: para madurar una fruta, almacena junto a plátanos o manzanas. Recetas: compotas o repostería saludable. | Compotas: de manzana, frutos rojos, ciruela o kiwi. Repostería saludable: como unas galletas con plátano, avena, nueces y canela unas tortitas de plátano con harina de avena, huevo, leche y canela, levadura y una pizca de sal. |
VERDURA | Enemiga: humedad y otras verduras y frutas. Almacenamiento: tela o nada. Truco: evita almacenar cebollas y patatas juntas. Recetas: purés de verduras o patés de verdura. | Puré: de verduras variadas. Paté: de verduras varias con aceite y frutos secos. |
RESTOS ELABORADOS | Enemiga: humedad y otras frutas. Almacenamiento: recipiente hermético y en baldas superiores. Recetas: croquetas o pasteles salados. | Croquetas: de cocido, pollo asado o de patata con verdura. Pasteles al horno: con verduras, carnes o pescados cocinados, a los que se añade una base de huevo y leche. |