Está demostrado que la alteración de nuestro sistema nervioso autónomo hace que durmamos peor, que estemos más estresados y que nuestras enfermedades y lesiones aparezcan antes y sean más graves.
Por tanto, una correcta evaluación y tratamiento de este sistema será clave en mejorar la calidad de vida de nuestros pacientes y poder intervenir por ejemplo en alteraciones del sueño, problemas de estrés, disfunciones uroginecológicas y patologías de dolor crónico.
¿Sientes que el ejercicio te deja agotado en lugar de lleno de energía? Muchas personas piensan que entrenar es sinónimo de fatiga extrema, pero la
Una práctica habitual entre muchos de nosotros es cargar el móvil en la mesilla de noche mientras dormimos. Así se recarga la batería mientras dormimos
En el ajetreo diario, encontrar tiempo para preparar comidas saludables puede resultar un desafío. Sin embargo, el batchcooking se ha convertido en una solución eficaz
